ELMUNDO.es | Efe
Madrid.- El Ejecutivo, que mandó a la Comisión Europea su Actualización del Programa de Estabilidad 2009-2013 con un párrafo en el que hablaba de elevar de 15 a 25 años el tiempo para calcular las pensiones, ha vuelto a enviar una corrección que suprime esta propuesta porque era "un ejemplo".
"Dado que dicha simulación ha podido interpretarse como una propuesta concreta, se ha eliminado el ejemplo del documento, y así se ha comunicado a la Comisión Europea", explica el Gobierno.
El Ejecutivo presentó el pasado viernes en el Consejo de Ministros su propuesta para reformar las pensiones, que incluye retrasar la edad de jubilación dos años, hasta los 67 años. En el documento también se hablaba de ampliar la base de la cotización para el cálculo de las pensiones, pero no detallaba hasta cuánto, algo que ha concretado ahora.
Elevar esta base de cálculo favorece a los trabajadores que puedan perder su empleo en sus últimos años de vida laboral, pero perjudica al que llegue a la edad de jubilación con cotizaciones regulares y elevadas en sus últimos años de trabajo.
Fuentes del Ejecutivo han hecho esta precisión ante las informaciones relativas a ese documento remitido a la Comisión Europea y en el que el aumento del periodo de tiempo para calcular las pensiones se presenta como una de las posibilidades para reducir el gasto público. Según las fuentes citadas, es "absolutamente falso" que haya una propuesta cerrada en ese sentido.
No obstante, el Gobierno señala en el documento que para garantizar la sostenibilidad de la Seguridad Social acordó remitir al Pacto de Toledo varias medidas entre las que figura la propuesta de ampliar "el número de años computados para calcular la pensión".
El original recogía entre otras propuestas que "si se aumenta en una década el número de años considerado para calcular la pensión" y se retrasa de 65 a 67 años la edad de jubilación, "el recorte total del gasto en pensiones podría alcanzar casi 4 puntos porcentuales del PIB a partir de 2030".
La rectificación reza ahora que "en concreto, cada año que se retrase la edad legal de jubilación se reduce en un punto del PIB el gasto en pensiones; cada año que se amplíe el número de años para el cómputo de la pensión se podría obtener una reducción adicional de 0,2 puntos porcentuales". No obstante, el Gobierno mantiene otro párrafo en el que propone, además de retrasar la edad de jubilación a los 67 años (ahorrando un punto del PIB por año, según los cálculos del Ejecutivo), "ampliar el número de años computados para calcular la pensión e incorporar elementos nocionales en el sistema, mejorar el sistema de ayudas familiares y los incentivos a la previsión social complementaria".
"Con una implementación ambiciosa de estas propuestas reducirá significativamente el gasto proyectado asociado al envejecimiento , en casi 4 puntos porcentuales del PIB a partir de 2030". Es decir, dos puntos del PIB por retrasar la edad de jubilación, y otros dos de ampliar la base de cálculo de las pensiones (son dos décimas del PIB por año).
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