Agencias | Barcelona
El acto de apoyo a Garzón promovido por la Generalitat, a través del Memorial Democràtic, y la plataforma ciudadana 'Un clam de justícia' se ha convertido en un clamor contra la "criminalización" del magistrado por las tres causas que tiene abiertas en el Supremo.
Bajo el lema 'El olvido es un insulto a la conciencia y a la dignidad humanas', una nutrida representación del PSC, de ICV y de EUiA, cargos ecosocialistas del Govern y el ex presidente catalán Pasqual Maragall han acudido a la convocatoria, de la que se han ausentado representantes de CiU, ERC, el PP catalán y Ciutadans.
El acto, que se ha celebrado en el Paraninfo de la Universitat de Barcelona, ha puesto de manifiesto que la figura de Garzón, acusado de prevaricar por investigar los crímenes del franquismo, divide a los partidos catalanes.
La vicepresidenta del PSC, Manuela de Madre; los portavoces parlamentarios Miquel Iceta y Joan Ferran, y la diputada Lídia Santos han representado al PSC.
Todos ellos han compartido banco con Pasqual Maragall, que ha despertado una gran ovación cuando ha entrado en la sala minutos después de que el acto hubiera comenzado.
El secretario general de Interior, Joan Boada; el secretario de Relaciones Institucionales y Participación de la Generalitat, Josep Vendrell, y el director general de Relaciones Institucionales del Govern, Fèlix Alonso, han sido los cargos del área de ICV y EUiA en el Govern que han querido respaldar con su presencia a Garzón.
De hecho, el Memorial Democrático, institución que busca la recuperación de la memoria democrática y que depende del departamento de Interior y Relaciones Institucionales de la Generalitat, ha apoyado abiertamente el acto.
El presidente del grupo de ICV-EUiA, Jaume Bosch; el coordinador general de EUiA, Jordi Miralles; la portavoz de ICV-EUiA en el Parlament, Dolors Camats, y la portavoz de ICV, Laia Ortiz, entre otros, han representado a ICV y EUiA, que comparten coalición electoral.
Mena, el más duro
La voz más crítica ha sido, no obstante, la del ex presidente de la Asociación Catalana de Juristas Demócratas y ex fiscal jefe de Cataluña, José María Mena, que ha asegurado que el juez de la Audiencia Nacional está siendo "injustamente criminalizado" por investigar los crímenes del franquismo.
Mena ha lamentado que se le impute a Garzón una dilación exagerada en la investigación que llevó a cabo sobre los crímenes del franquismo, cuando el Tribunal Constitucional sigue "empantanado" con el Estatut desde hace cuatro años, "obstruyendo impunemente" la expresión de la voluntad política soberana de Cataluña.
Ha explicado que los descendientes directos de las víctimas pidieron ayuda a Garzón para esclarecer qué paso con sus familiares y poderles dar una "sepultura digna", y ha considerado al juez como "el más prestigioso exponente de la independencia judicial".
Ha lamentado que frente a los herederos de las víctimas "aparecen los herederos de los fascistas, fascistas también ellos", en referencia a los querellantes contra el juez.
Según Mena, "nunca debió admitirse a trámite" la querella contra el juez porque "amenaza gravemente la independencia judicial" y no es admisible que las víctimas queden privadas del amparo judicial que en su día reclamaron.
Al acto de Barcelona también ha asistido el ex fiscal anticorrupción Carlos Jiménez Villarejo, que participó el pasado día 13 en otro acto de reconocimiento y apoyo al juez Baltasar Garzón organizado por los sindicatos UGT y CCOO.
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