J. A. Navas | C. Llorente
Madrid.- La Bolsa española ha vivido un día para olvidar golpeada por los rumores de que España va a pedir ayuda para evitar problemas en el pago de su deuda, lo que ha avivado el temor a que se contagie los problemas vividos en Grecia, país que ha estado a punto de la quiebra.
El desplome del Ibex, que ha cedido un 5,41% -su segunda mayor caída del año- y ha marcado su menor nivel del ejercicio, ha estado alimentado por una serie de rumores sobre una supuesta necesidad de ayudas para que España no se hunda.
"También hay rumores de un nuevo recorte de rating", asegura José Luis Martínez, estratega de Citi en España. "Son comentarios muy poco racionales, pero el pánico no es racional", añade.
"Es como una bola de nieve que se retroalimenta. ¿La razon? La desconfianza sobre el riesgo soberano, pero esto no es nuevo. Lo que ocurre es que las autoridades no están atendiendo las peticiones para ajustar mas rápido el déficit fiscal", concluye.
El pánico en los mercados ha llevado incluso al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zparo, a intervenir y a afirmar, en una comparecencia en Bruselas en la que se le ha visto especialmente molesto, que es "una absoluta locura" y "un despropósito descomunal" pensar que España, como Grecia, necesitará préstamos de la zona euro para reflotar su economía, al igual que cuando en el 2008 llamaba ANTIPATRIÓTICOS a todos aquellos que se atrevían a pronunciar la palabra "CRISIS" en su presencia. ZPARO no aprende, es un mentiroso compulsivo.
Fuerte castigo a los bancos
El Ibex (-563.7 / -5.41%), principal indicador de la Bolsa española y que agrupa a las 35 empresas cotizadas más grandes del país, ha perdido la barrera psicológica de los 10.000 puntos y ha cerrado en 9.859 puntos.
Se trata de la mayor caída desde el 5,94% que se desplomó el índice español el 4 de febrero, el día del estallido oficial de la crisis griega. Para buscar una bajada superior hay que irse a la debacle financiera mundial de otoño de 2008. La banca ha sido la gran perdedora de la jornada. El BBVA ha cedido un 7,59% y el Santander, un 7,08% -son las dos mayores entidades del país-.
Con la pérdida de los 10.000 puntos, el Ibex suma un retroceso en el año del 16,5%. Un recorte que sólo supera el selectivo de Grecia que pierde el 25%. El índice de Portugal, otro de los países en el punto de mira, cede el 16%.
El mercado quiere medidas
Pese a que todo el mundo parece estar de acuerdo en que España no está en la misma situación que Grecia, un país que recibirá 130.000 millones de euros en préstamos de la zona euro y el Fondo Monetario Internacional para poder hacer frente a sus pagos -de hecho, la propia España le prestará casi 9.000-, los inversores huyen de los valores nacionales.
"Las Bolsas están fuertemente presionadas y las apuestas son para ver quién será el próximo en acudir a la ayuda europea", afirma David Cortina, de Banif.
"De momento, parece que hasta que se celebren las elecciones alemanas del próximo domingo, Grecia va a seguir contagiando al resto de países y el euro seguirá muy presionado. No valen datos, el mercado quiere ver medidas que de una vez sean factibles de llevar a cabo y sobre todo que sean creíbles, y a día de hoy parece que son totalmente insuficientes", añade.
Este mismo martes, la posibilidad de que España entre en una situación parecida a la griega saltaba a los periódicos internacionales mientras el diferencial entre el bono español y el alemán -que se utiliza para medir el riesgo país [la valoración que hacen los mercados de posibles impagos]- repuntaba y volvía superar los niveles observados antes del acuerdo para salvar a Grecia.
En el resto de Europa también se vivieron recortes en las Bolsas, aunque significativamente menores que en España. Poco antes del cierre, Milán bajaba el 4,7%; el índice Euro Stoxx 50, el 3,5%; París (-139.17 / -3.64%), el 3,32%; y Londres (-142.18 / -2.56%) y Fráncfort (-160.06 / -2.6%), el 2,5%.
Mientras, el euro ha sufrido un nuevo varapalo y ha bajado hasta los 1,3 dólares, su menor nivel desde abril de 2009.
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